Sistema de enjuiciamiento en materia penal. Los requisitos neoinquisitivos. AUTOR: Rusconi, Maximiliano
derecho procesal penal, penal
Edición: 1ª edición
Año: 2017
Páginas: 320
Medida: 23 x 16 cms.
Peso: 0,540 kgs.
ISBN: 978-950-741-865-5
CAPÍTULO I |
PRINCIPIOS GENERALES |
§ 11. División de poderes en el proceso penal e investigación a cargo del Ministerio Público |
a) Introducción |
b) Principio acusatorio formal, derecho de defensa y eficacia en la investigación |
c) División del poder en la organización constitucional: el paradigma del «no |
autocontrol» |
d) Seccionamiento del ejercicio del poder penal del Estado en el sistema de enjuiciamiento |
§ 12. ¿Un sistema de enjuiciamiento influido por la política criminal? |
a) Los contornos de la presente contribución |
b) La formulación del problema |
c) El punto de partida empírico ineludible para el entendimiento políticocriminal delsistema de enjuiciamiento: la crisis de la justicia penal |
1. La trascendencia de establecer el punto de partida empírico |
2. ¿Crisis? |
3. Las razones últimas de la llamada crisis del sistema penal: ¿supervivencia |
del diagnóstico de la criminología crítica? |
d) ¿Es posible el derecho procesal penal en el marco del Estado de Derecho?; un |
aporte reciente a la discusión |
e) El proceso penal como reglamento de garantías |
1. El sistema de enjuiciamiento como manifestación sistemática de los límites constitucionales para la aplicación de una pena legítima |
2. Mínima intervención penal y mínima intervención procesal: el programa |
constitucional como un programa de sistema penal mínimo |
3. El impactode losprocesosde reformadelsistemade enjuiciamientopenal |
en América Latina enladécadadel ’90:unaumentodelprotagonismoprocesal |
4. Elprogramagarantistacomounsistemadelímites:lanecesidaddenodesvirtuar elsentido deslegitimador |
5. Las garantías orgánicas |
6. ¿Necesidad de una lectura adicionalsobre los puntos de partida garantistasque surgendelsistema internacionaldeprotecciónde losderechoshumanos? |
7. Un punto de inflexión para elsistema de garantías: el problema de la verdad en el proceso penal |
f) ¿Qué podemos esperar delsistema procesal penal en elfuturo? |
§ 13. «Iura novit curia» y congruencia: la garantía del derecho de defensa entre |
hechos y normas |
a) El problema |
b) Uncambiodeparadigma: elsistemade enjuiciamientocomoreglamentación |
de los límites escénicos para la adjudicación de una pena en forma legítima |
c) Lagarantíadelderechodedefensa:unagarantíaolvidada enlapráctica y con |
gran poder de configuración delfuturo del proceso penal |
d) ¿Qué debe implicarla garantía del derecho de defensa en el ámbito delsistema de enjuiciamiento? |
1. Existencia de una imputación clara y precisa |
2. Comunicación de la imputación en audiencia al imputado |
3. Derecho a ser oído con respecto a esa atribución |
4. Congruencia entre fallo e imputación |
5. Derecho a la configuración probatoria a partir del hecho imputado |
e) Imputación necesaria y su comunicación |
f) Precisión de la imputación |
g) El principio de congruencia |
h) Congruencia meramente táctica y principio «iura novit curia» |
i) El principio de congruencia bajo la luz de los sistemas regionales de protección de los derechos humanos |
j) Datosfácticos ydatosnormativos comodimensionesinseparablesalahorade |
garantizar al principio de congruencia como manifestación de la garantía del |
derecho de defensa |
k) La norma como selección arbitraria de un sector de la realidad |
l) Congruencia desde la evitación de la sorpresa |
m) Congruencia: loslímites entre acción y omisión |
n) Congruencia, dolo e imprudencia |
ñ) Formas de intervención |
o) Tipos penales complejos por la multiplicidad de verbos (alternatividad normativa interna) |
p) Relaciones concursales |
q) ¿Es una solución la acusación alternativa? Alternatividad normativa externa |
r) ¿El problema se soluciona con el deber judicial de la advertencia al acusado |
sobre la posibilidad de un cambio normativo? |
s) ¿Elfuncionamiento de la prohibición solo a favor del imputado? |
t) Conclusión |
§ 14. Diálogo procesal, evitación de la sorpresa y resguardo del derecho a defenderse |
a) Para comenzar por el principio: ¿qué eslo que inspira al proceso penal? Elrol |
de las garantías y la búsqueda de la verdad |
b) Elsistema del derecho penalsustantivo y del modelo de enjuiciamiento como |
estructuras comunicacionales |
c) La llamada «garantía del derecho de defensa» |
d) Lo primero que hay que comunicar: los hechos. Ninguna sorpresa posterior |
e) Lo segundo que hay que comunicar: la norma involucrada. Ninguna sorpresa |
posterior |
f) Ausencia delrecorte normativo y precisión contraproducente |
g) Lo tercero que hay que comunicar: la prueba. Ninguna sorpresa posterior |
h) Los conceptosde imputaciónenel ámbitode ladogmática jurídicopenal y en |
el ámbito delsistema de enjuiciamiento |
i) De la teoría a la praxis: los dislates de la vida práctica del sistema judicial en |
materia penal |
j) La mera invocación normativa |
k) La mera infracción de un deber |
l) Las autorías siamesas: todos hacen lo mismo, en el mismo momento y en el |
mismo lugar |
m) La imputaciónimposible: atribucióndehechos «funcionariopúblico» aquien |
no esfuncionario público |
n) La mera descripción del hecho: diagnosticar no es comunicar |
ñ) La prueba siamesa: la misma prueba para todos |
o) La prueba como «todo lo que hay»: cargo, descargo y neutral |
p) El hecho individual imputado como guía estratégica de la prueba |
q) La norma individual imputada como guía estratégica de la prueba |
r) ¿Una sola bala imputativa? |
s) ¿Solución? |
1. El momento de la indagatoria |
2. Verdad y organización judicial |
3. Verdad y formación judicial |
CAPÍTULO II |
LA REFORMA PROCESAL |
§ 15. Los recientes procesos de reforma del proceso penal en América Latina: una |
evaluación |
a) La crisis de la justicia penal en América Latina. El modelo inquisitivo en el centro de la observación |
b) Las dimensiones de la transformación delsistema de enjuiciamiento |
c) Los caminos no transitados o las deudas pendientes |
d) ¿Abandono de la inquisición?: la situación actual delsistema de enjuiciamiento en América Latina y la pérdida de protagonismo de las garantías constitucionales como agenda de cambio |
e) La necesidad de retornar a loslímites: ¿mínima intervención procesal? |
§ 16. La reforma procesal: entre el abandono del modelo inquisitivo y la reglamentación de garantías constitucionales |
§ 17. Sobre el nuevo Código Procesal Penal. Análisis crítico |
a) La política criminalsometida a cambios |
b) Análisis del nuevo Código |
11. El nuevo Código Procesal Penalsobre la base de algunos ángulos de mira |
12. ¿El nuevo Código Procesal Penal como una evolución continua de la propuesta del «Proyecto Maier»? |
13. ¿Abandono de la Inquisición? |
14. La enunciación de las garantías y principiosfundamentales |
15. La multiplicación de salidas alternativas en el proceso |
16. Técnica legislativa. Lenguaje y organización judicial |
17. La situación del imputado en el nuevo Código |
18. El impertinente rol de la víctima |
19. Elrol del Ministerio Público y la investigación a cargo delfiscal |
10. Elrol investigador de la policía |
11. La preocupación porla duración del proceso |
12. La validez de los actos procesales y el efecto de las nulidades |
13. La multiplicidad de medidas de coacción |
14. La regulación de la prisión preventiva |
15. El legajo de investigación del Ministerio Público |
16. La obligación de denunciar |
17. Los casos «NN» y lasinvestigaciones genéricas |
18. El control de la acusación |
19. La víctima como generación de control de los dictámenes de cierre del caso por parte delfiscal |
20. La formalización de la investigación penal preparatoria |
21. ¿Jurados? |
c) Los caminos no transitados(o las deudas pendientes) |
d) Una conclusión: una reforma hecha «a la que te criaste» |
e) Otra conclusión: ¿y si dejamos a Torquemada descansar —en paz o no—? |
CAPÍTULO III |
MINISTERIO PÚBLICO Y TRANSFORMACIÓN JUDICIAL |
§ 18. Reforma del sistema de enjuiciamiento, Ministerio Público y relaciones entre el juez y el fiscal |
a) Lastransformaciones delsistema de justicia penal en América Latina |
b) Los ejes procesales de la reforma |
c) El papel del Ministerio Público |
d) Algunasrazonesfundamentales para incluir en los programas de reforma del |
sistema penal una redefinición orgánica y conceptual del Ministerio Público |
1. El Ministerio Público como un instrumento indispensable para la vigencia |
del principio de «mínima intervención» |
2. El Ministerio Público como garantizador del seccionamiento del ejercicio |
del poder y el paradigma del control externo en el sistema de enjuiciamiento penal |
3. El Ministerio Público como la única esperanza para un control efectivo de |
la instancia policial |
e) Conclusión |
§ 19. Reforma procesal y la llamada ubicación institucional del Ministerio Público |
a) Planteo del problema |
b) La cuestión tal como ha sido planteada tradicionalmente |
1. Dependencia institucional del PoderJudicial |
2. Dependencia institucional del Poder Ejecutivo |
3. Dependencia del Poder Legislativo |
4. Independiente o como órgano extrapoder |
c) LacuestiónenlaConstitucióndelaprovinciadeSalta:elparadigmadeladecisión constitucional |
d) La posición del Proyecto de Ley Orgánica para la Justicia Penal y el Ministerio |
Público: un cambio de enfoque |
§ 10. ¿Cuándo haremos algo (seriamente) por el Ministerio Público Fiscal?: usando como excusa el debate acerca de la inserción procesal de la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas |
a) Una pequeña reseña de la coyuntura |
b) La (in) trascendencia del camino propuesto para el debate: la historia de un |
organismo sin historia |
c) Otro modo alternativo de titular el problema que estaba en la base de la Res. |
PGN 147/08 |
d) El debate permanente: el (nulo) modelo organizativo que está en la base del |
conflicto |
1. Transformación judicial y justicia penal en crisis |
2. Cambio procesal y los desafíos del Ministerio Público |
3. Lo que sigue luego de la adopción de acuerdos meramente terminológicos |
4. Las demandas comunitariassobre el Ministerio Público |
5. La historia del Ministerio Público Penal y el contexto actual |
6. La crisis del Ministerio Público Fiscal |
e) La construcción del Ministerio Público |
f) Debates vacíos de contenido en el ámbito de la reforma procesal. El tiempo |
perdido de la discusión sobre el modelo acusatorio |
g) La relación institucional delMinisterio Público en el escenario del poder constitucional |
h) La relación interna de los fiscales del Ministerio Público: la organización del |
organismo hacia adentro de la institución |
i) Acercamiento al caso como eje estructural de la organización |
j) El problema de la víctima |
k) Desformalización de la instrucción |
l) Conclusión |
CAPÍTULO IV |
INOCENCIA Y SANCIONES PROCESALES |
§ 11. Prisión preventiva y límites del Poder Penal del Estado en el sistema de enjuiciamiento |
a) Introducción |
b) Principio de inocencia. La cuestión terminológica y la cuestión sustancial |
c) Sobre la fundamentación, límites y controles del encarcelamiento preventivo |
1. El punto de partida |
2. Sobre la posible ilegitimidad del instituto |
III. El nacimiento de una medida de coerción a partir de la interpretación |
de una garantía en contra del imputado |
III. Las «aporíasteóricas» destacadas por Luigi Ferrajoli |
3. La cuestión de la proporcionalidad |
4. El carácter necesario. La garantía de excepcionalidad |
III. Incapacidad estatal e imprecisión en la regulación de los mecanismos |
de coerción |
III. Medidas alternativas al encarcelamiento preventivo |
III. Las condiciones del encarcelamiento preventivo y el efecto del incumplimiento (art. 313, CPPN) |
CAPÍTULO V |
SALIDAS ALTERNATIVAS AL CASO PENAL |
§ 12. Mediación en el sistema penal: hacia una política criminal guiada por el conflicto y su solución |
a) Introducción |
b) Lamediacióncomounsistemanovedosodestinadoadescomprimir elsistema |
penal |
c) La mediación como un modelo de mayor participación de la víctima |
d) La mediación como una hipótesis de desformalización de la instrucción |
e) La mediación como una opción de fortalecimiento del rol del autorimputado como sujeto de derechos |
f) La mediación como una tendencia a la introducción en el proceso del eje estratégico «resolución o redefinición del conflicto» |
g) La mediación como un intento de humanización del proceso penal,facilitando un acercamiento a lasreales necesidades de los protagonistas,reduciendo |
la interpretación forense de la vida cotidiana |
h) Tesis: una opción ideológica a favor de la reducción del espacio políticocriminal del proceso penal. El principio de subsidiariedad |
i) Los procesos de reforma penal han ampliado la participación de la justicia penal |
j) Sobre la real posibilidad del proceso penalrespetuoso del Estado de Derecho |
k) Las posibles objeciones al instituto |
l) El problema de la verdad |
m) La mediación como una estrategia de abarcar conflictos que el proceso penal |
no puede traducir: el caso de las comunidadesindígenas |
n) Una conclusión: aunque no hay porqué concluir |
CAPÍTULO VI |
RECURSOS Y CONTROL DE DECISIONES |
§ 13. El recurso de revisión en el derecho procesal penal |
a) Presentación del problema |
b) La previsible y repetida discusión sobre su «naturaleza jurídica» |
c) Un poco de historia |
d) La regulación delrecurso en el Código Procesal Penal de la Nación |
1. El Código Procesal Penal |
2. Algunas notas genéricas |
3. Trámite delrecurso |
4. La unilateralidad de la revisión |
5. El concepto de ley penal más benigna |
6. La taxatividad de la regulación |
e) Responsabilidades ulteriores: el errorjudicial |
f) A modo de conclusión |